MINIRELATO

Un ex-compañero de clase, Alberto, de los tildados como populares habla por teléfono después de muchos años con uno de los que no disfrutaban de buena opinión pública en clase. Pedrito, solía ser una buena persona, pero su incapacidad para comportarse como una persona normal le había creado problemas toda su infancia y parte de la adolescencia. Ahora 9 años después habla sin rencor. La conversación se mueve entre culpabilidad por parte de Alberto y optimismo por la de Pedrito. Éste, se da cuenta de lo malo que ha sido y piensa que es un tipo genial. Que al final todos somos iguales. Que un tipo nada odioso como aquel hacia que una parte de él se estremeciera por todas sus tropelías pasadas.



(Risas cortadas pero sinceras y extrañas al teléfono)



Pedrito: Pues sí. Ya tengo el piso



Alberto. : Qué bien.



Pedrito: Sí. ya llevo una semana con él.



Alberto: ¿Y qué tío, ya has estrenado el piso? Jeje.



(Más risas, que inexplicablemente se extienden más de lo debido por la rareza

de la conversación)



Pedrito: Sí tío. Jaja.

Alberto. Ah sí ¿eh?

Pedrito : Jeje sí. Ya el primer día cagué en el piso. Y el otro baño hoy lo he estrenado también.


Alberto se siente mejor persona y cuando recuerda sus fechorías pretéritas no puede evitar que una sonrisa delate su estado de ánimo.